A veces la vida te sorprende con noticias tan esperanzadoras como esta, y te das cuenta que, aunque queda mucho por hacer para que la atención sanitaria sea inclusiva, se van dando pasitos para que cualquier personita que sea atendida por el personal sanitario se sienta respetada, comprendida y sobre todo que sienta que es ajustado a sus características personales si es necesario.

Es importante sensibilizar a los futuros sanitarios en la parte más social de su profesión, ya sea en la atención de personas trans, de personas con VIH, de personas con diversidad funcional,…

La educación en diversidad sexual, de género y familiar debería partir desde la primera infancia y estar integrado en el currículum dentro de las escuelas, pero aun estamos lejos de eso. Por eso estas noticias son de suma importancia para llegar a conseguir sociedades más avanzadas, inclusivas y respetuosas.

Espero que esta iniciativa se extienda a otros grados vinculados a la salud y también al resto del territorio español.

El recorrido que falta es largo, pero siempre se consigue llegar iniciando la marcha.